TESTIMONIOS REALES DE ALGUNAS DE NUESTRAS ALUMNAS:
«Os voy a dar mi opinión sobre los beneficios que me han proporcionado los ejercicios hipopresivos que llevo practicando varios años.
Tengo 69 años y noto que tengo más agilidad para moverme, pero sobre todo cómo tengo las manos. Me iban a operar del túnel carpiano y he notado que practicando estos ejercicios me ha desaparecido la sensación tener las manos dormidas todo el día. Otra cosa de la que estoy casi bien del todo es de los hombros, tengo roto el tendón del supraespinoso en los dos hombros y sólo podía subir los brazos a la altura d los ojos, ahora los subo perfectamente con cuidado pero sin dolor. Muchas gracias a la persona que imparte estos ejercicios hipopresivos!!!» (Maribel, 69 años)
«En general me ayuda a controlar mi dolor de espalda lumbar, mejora mi esquema corporal y el tono muscular .
Pero particularmente me ayudan los ejercicios con el linfedema, he mejorado la movilidad del hombro y la sensación de pesadez también.
También me ayuda mucho a ganar flexibilidad.
A nivel social, es una pasada el ambiente tan chulo que se crea con los compañer@s y con la profe. Hay mucha complicidad en el grupo.» (Isa, 47)
«Soy una señora mayor con buena salud y aún con un buen nivel de flexibilidad y es algo que no quisiera perder con el paso de los años, al menos más rápido de lo normal.
Con la respiración conseguimos abrir bien la caja torácica y bajar el nivel de ansiedad. ¡Me siento oxigenada!
Asistir a estas clases me hace mantener la concentración en el ejercicio, ¡El mundo y su problemática se aleja!
Me proporcionan flexibilidad y tonicidad tan necesaria para conservar el equilibrio, no son edades para caídas! Mi postura ha mejorado y esto me permite andar, sentarme correctamente y mantener la agilidad.
Las clases acaban con los estiramientos y esto me permite sentir los músculos y ver su capacidad, muchas veces por mi olvidada.
Recomendaría, por tanto, está actividad a cualquier edad y en cualquier situación. ( Mercedes)
«Con este tipo de ejercicios evité tener que operarme del cuello uterino.
Con la entrenadora que tenemos todo nos lo ha hace más fácil. Ella nos da la tranquilidad y la confianza que necesitamos para realizar estos ejercicios.
Y ahora en estos momentos de encierro, hemos podido comprobar lo que yo pensaba, que sin ella, esto no es lo mismo, ni tan efectivo.
Con estos ejercicios se consigue una condición física buenísima, para poder realizar cualquier otro deporte, ya que se adquiere mucho fondo, fuerza en la espalda, cintura escapular, piernas, brazos y sobre todo, mucha fuerza de todos los músculos internos, tanto los abdominales, como del resto.
Por eso opino que es un ejercicio óptimo para realizar como complemento a cualquier otro deporte.
Yo estoy encantada.
Lo recomiendo a todas aquellas personas, con problemas de incontinencia y dolores de espalda o de cuello. Mejoran notablemente, hasta llegar a desaparecer, como ocurrió en mi caso. E incluso me atrevería aconsejar, que antes de realizar cualquier ejercicio físico, se debería de realizar un calentamiento basado en ejercicio hipopresivo.» (Lourdes, 47 )