En los tratamientos de onda de choque extracorpórea (ESWT), la onda es producida por una pequeña explosión generada bajo el agua dentro del aplicador. Esta onda es focal a través de una lente y transmitida dentro del tejido.

La onda de choque focal puede ser generada electromagnéticamente. Tiene una alta energía, alrededor de cien veces más potencia que una onda de presión radial, haciéndola óptima para un amplio rango de utilizaciones en urología, indicaciones ortopedicas, cardiología y neurología.

Las ondas de choque extracorpóreas han demostrado:

• Tener efecto analgésico y antiinflamatorio
• Aumentar temporalmente la vascularización
• Activar la angiogénesis.
• Rompen los depósitos óseos o calcificaciones
• Estimulan la formación ósea en procesos de fracturas y pseudoartrosis.
• Por último, aunque no menos importante, hay que destacar el poder de las ondas de choque, como alternativa a ciertas intervenciones quirúrgicas, con la reducción del riesgo que esto supone.

La terapia de Ondas de Choque resuelve afecciones que de otra manera podrían requerir cirugía como espolón calcáneo o calcificaciones en el hombro sin necesidad de analgésicos. Esto, aunado a ser una terapia no quirúrgica, sin necesidad de analgésicos, hace que sea una terapia ideal para acelerar la recuperación y curar diversas indicaciones que causan dolor agudo o crónico.

El tratamiento de ondas de choque está basado en una onda acústica que lleva mucha energía a los puntos dolorosos y tejidos musculo-esqueléticos con condiciones subagudas, subcrónicas y crónicas. La energía promueve la regeneración y procesos reparativos de los tendones, músculos y otros tejidos blandos.

La energía cinética del proyectil, generada por el aire comprimido, se transfiere al transmisor en el extremo del aplicador y adentrándose en el tejido donde disuelve calcificaciones, cura la inflamación crónica y alivia el dolor crónico.

INDICACIONES teniendo en cuenta sus EFECTOS:

Efectos Mecánicos:

– Piedras en el riñón, vesícula y glándula salivar
– Calcificaciones Tendones: Manguito de los Rotadores del Hombro

Efectos Biológicos:

– Tendinopatía Degenerativas
– Epicondilitis
– Tendinitis del hombro, cadera, rodilla y tobillo (tendón de aquiles)
– Fascitis Plantar

Enf. de De Quervain.

Pseudoartrosis: En huesos largos, cortos, de la mano y de pie

Fracturas de estrés.

Necrosis del hueso: en la muñeca, cabeza y condilos del femur y astragalo (pie).

Inflamación del hueso: Rodilla y astrágalo

Heridas cutáneas

Ulceras cutáneas

Quemaduras cutáneas

Espasticidad

– Miopatías
– Síndrome Miofascial
– Lesiones Musculares

Indicaciones en fase experimental (con resultados alentadores):

– Miocardiopatía Isquémica.
– Prostatitis abacteriana.
– Infecciones por bacterias y hongos
– Ulceras cutáneas infectadas
– Osteomielitis
– Infección Periprotésica

Osteoporosis localizadas:

– Síndrome del Dolor Regional Complejo o SDSR (Sudeck)
– Osteoporosis y aflojamiento periprotésico
– Enfermedad Periodontal.

Fisioestética: ayudan a combatir la celulitis.

Ventajas generales: no invasiva, sin drogas, rápida, sin dolor y sin efectos secundarios.

¿Me ayudará la Terapia de Ondas de Choque?
La evidencia ha mostrado una efectividad del tratamiento de hasta 90% de los pacientes sometidos a tratamiento con Terapia de Ondas de Choque.

¿Con cuánta frecuencia necesitaré el tratamiento con ondas de choque?
La mayoría requieren 3-5 sesiones que se realizan con 3-10 días de diferencia, dependiendo de la tolerancia del paciente y su respuesta tisular.

¿Sentiré algún dolor después del tratamiento?

La mayoría de los pacientes experimentan alivio inmediato del dolor después del tratamiento.

¿Existen algunas contraindicaciones para el tratamiento?

El tratamiento debería ser supervisado siempre por un profesional sanitario, el cual conozca el expediente personal del paciente

¿Quién debería REALIZAR TRATAMIENTOS CON ONDAS DE CHOQUE

Profesionales que cuenten con los conocimientos y habilidades necesarias y precisas para poder hacerlo de una forma segura y eficaz para el paciente.