¿Qué es el chasquido de la ATM?
El chasquido mandíbular es un ruido que se produce en algún momento de la apertura de la boca, el cierre o en ambos en la articulación temporomandibular (ATM).
¿Qué es el chasquido de la ATM?
El chasquido mandíbular es un ruido que se produce en algún momento de la apertura de la boca, el cierre o en ambos en la articulación temporomandibular (ATM).
La articulación temporomandibular (ATM) es la articulación que conecta la mandíbula con el cráneo. Está formada por un conjunto de estructuras anatómicas que permiten a la mandíbula realizar movimientos de lateralidad, apertura y cierre y también en sentido anteroposterior. Todos estos movimientos están presentes en las funciones de masticación, habla y deglución.
Las superficies articulares que componen la ATM son:
– Cóndilo mandibular
– Cóndilo temporal
– Menisco articular (entre los dos anteriores)
El chasquido se produce por un conflicto articular entre las 3 superficies articulares y por la mala coordinación motora entre el músculo pterigoideo externo y los otros músculos masticadores.
Podemos encontrarnos ante tres situaciones:
– Hipermovilidad articular: donde existe hiperlaxitud de los ligamentos y de la cápsula y llama la atención la gran apertura bucal del paciente. Ésta se acompaña de ruidos articulares sin dolor. Al final de la apertura, el cóndilo mandibular sobrepasa la eminencia articular del temporal.
– Subluxación: Se caracteriza por un chasquido durante la apertura y cierre. El cóndilo se desplaza pero sigue existiendo contacto entre las dos superficies articulares. Suele reducirla el propio paciente. Puede haber dolor.
– Luxación: Intenso dolor, limitación del ángulo de movimiento y ausencia de chasquido articular durante el movimiento, ya que el menisco no se reduce y persiste en su posicionamiento anterior. En la forma crónica disminuye el dolor y persiste el bloqueo. Existe una separación completa de las superficies articulares y necesita reducción por parte del médico.
Realizamos un tratamiento osteopático craneal y mandibular para intentar normalizar el tono muscular y reducir la subluxación discal en caso de que exista. Ademas para reducir dicha contractura se pueden estimular con neuromodulación (electroacupuntura) los músculos afectados.